¿Alguna vez se pusieron a pensar como seria si volásemos? ¿Si pudiésemos alcanzar el cielo? Porque podemos nadar, con entrenamiento podemos aguantar minutos abajo del agua y jugar a ser peces o animales de agua, en la tierra podemos caminar, correr, hacer pozos, podemos construir y derribar, pero ¿a volar? ¿Con qué entrenamiento podemos volar?
Solamente con la fuerza de nuestro corazón es que podemos volar, solamente con la fuerza de nuestra imaginación es que podemos alcanzar el cielo, solamente sentimentalmente podemos flotar.
¿Cómo será ese momento en que el ave descubre que puede volar, que tiene alas para alcanzar el aire sin tocar el suelo? ¿Cómo será ese momento en el cual el ave despega de la tierra para no dejar el cielo?
Me imagino que debe ser una sensación de ser invencible, una sensación de conquistar el mundo, una grandeza no comparable con nada. A donde sea como sea podemos escapar al lugar que quisiéramos con tan solo mover las alas.
Ahora como nosotros solo podemos alcanzar el cielo con el corazón, con los sentimientos, de la misma forma nos sentimos invencibles cuando el amor está en nuestro corazón inundándonos, de la misma forma podemos sentir ese conquiste del mundo y que podemos llevarnos todo por delante.
Pero el pichón cuando comienza el aprendizaje cae, cae más de una vez, cae muchas veces y de tener esa sensación invencible, tenemos una sensación de fracaso, de desaliento, de pérdida de tiempo, de no poder volver a confiar en poder volar, que el vuelo solo será cuestión de tiempo a tocar el suelo de vuelta. Solo será cuestión de tiempo para que volvamos a caer, y por más que quisiéramos volar eternamente en algún momento volvemos a caer.
Tengo la fe que ese pichón en algún momento es ave, en algún momento descubre como volar, como tocar, el cielo sabiendo cómo y cuándo tocar el suelo.
Tengo la fe que de tanto caer cuando creía volar en algún momento sepa volar y cuando tocar el suelo.
Por ahora soy un pichón que no aprendió a volar sin romperse contra el suelo, sin saber aterrizar y me pasa por pensar que soy invencible, por pensar que puedo contra todo, por pensar que todo es posible si uno AMA pero hace falta la experiencia de cuando y como amar, no se puede controlar.
Confío que es cuestión de tiempo para extender mis alas y saber cómo aterrizar para no salir más lastimado.
Confío en que mis alas en algún momento no me van a abandonar, confío en que si me DAS ALAS, es para que VUELE hasta vos, no para volver a aterrizar mal.